viernes, 2 de noviembre de 2007

CHILE+CULTURA. Critica Pagina "El Zocalo"


Por segunda oportunidad se desarrolló en la ciudad de Cartagena el programa Chile +Cultura, logrando convocar a unas tres mil personas que compartieron en familia las diversas actividades culturales ofrecidas por artistas y gestores de toda la región de Valparaíso.

Una jornada de éxito pero que sudó la gota gorda con detalles coyunturales que les comentaremos. Perfectamente podríamos decir que “CARTAGENA TIENE FESTIVAL”… por lo menos hasta el 2010, porque ese fue el mandato de la presidenta Michelle Bachelet, dentro de las actividades del bicentenario, éstas tienen el propósito de poner en valor a artistas locales dentro de comunas que pocas veces tienen oportunidad de disfrutar de grandes eventos culturales; de la misma manera fomentar la interrelación entre distintos agentes culturales. Para este Chile+Cultura hubo desde lecturas poéticas, pasando por la música clásica, hasta el hip-hop. La oferta cultural era para todos los estilos y edades ya que la tercera edad pudo disfrutar de lo que se denominó como “terraza patrimonial”, instalación donde se exhibieron joyas mapuches, mascarones de proa y distintas formas de coleccionismo. Los niños tuvieron sus actividades de la mano de payasos, malabaristas y de las expresiones plásticas. La juventud contó con un escenario propio por el cual se paseó el hip-hop, “break dance” y unas folkloristas de piernas torneadas llamadas Las Lulú de Pancho. Pero lo que concitó más atención fue el escenario central donde se presentaron La Sonora Palacios, Sonora de Llegar y el sanantonino Chinoy jugando de local.

El adagio dice que las segundas partes nunca son buenas, en parte se cumplió y en parte no; en este caso las debilidades no son el contra, sino las amenazas: lo malo del producto ofrecido sino las situaciones que desembocan en ella. Chile+Cultura se realizó el mismo día que se jugaba un clásico del fútbol nacional, y cuando en este país juega la Universidad de Chile con Colo-Colo todo se detiene; los hombres de la casa abrazan la cerveza y de ahí hay un blackout hasta que suena la alarma del reloj el lunes a las 7am. Al parecer la producción tenía manos femeninas que no revisan el calendario del fútbol y suacate que se resbalan con detalles como ese. Cartagena no era la excepción y a la producción seguramente le tiritaron las cañuelas pensando en una baja concurrencia.

A las 16:15 llegó la ministra Paulina Urrutia y se la jugó con simpatía y llegada con el público, esto llegaría al punto que invitada a bailar cueca con la música de Las Lulú de Pancho, improvisadamente tomó pañuelo y dejó sus zapatos con grueso taco a un lado para hacer las medialunas que caracterizan a nuestro baile patrio. Cuando sucede pausa en el protocolo como esta esperamos que los medios de prensa se abalancen sobre las autoridades y se genere el alboroto, pero no fue tal porque la prensa simplemente no llegó. A lo menos la prensa-convidada-de-piedra: los grandes medios. Este es otro de esos imponderables puesto que este fin de semana una banda había asaltado un banco y se investigaba su hipotética huída hasta la zona de Valparaíso; por ello se dijo que la prensa estaba pendiente de dar con la exclusiva de la captura y no con la cultura importada a Cartagena.

Claramente esta segunda versión no tuvo la misma convocatoria de la vez anterior y aquí jugó el factor clave del fútbol y que la actividad es un día domingo. Se trabajaron ciertas debilidades históricas pero se anexaron actividades que a todas luces son una ruleta rusa. Si bien hay que ser persistente para inculcar literatura, las lecturas poéticas no logran convocar público, y por más que se insista volvemos a tropezar varias veces con la misma piedra. Dentro de lo positivo estuvo la actuación (en doble función) de CreaDanza, quienes intervinieron la Plaza de Armas y la avenida frente a la Playa Chica. También hubo doblete en la presentación de los artistas asociados al centro cultural Claroscuro, quienes intervinieron la elevación del escenario de la plaza dibujando la silueta de sus integrantes y transeúntes, pero sin mucho éxito; seguramente la performer nacional Lotty Rosenfeld también hubiese hecho alguna mueca extraña si los hubiera visto en acción. Para el doblete fue peor, porque un comensal que los había visto en la plaza avisó al público de la Playa Chica que lo de los artistas visuales era “pura locura” y cierto es que el público se disipó antes de cumplirse un minuto.

El escenario de los niños fue uno de los más favorecido con el cambio de artistas, la “Compañía Ampolleta Prendía” sí fueron divertidos en comparación al mimo del 2006. Y lograron mantener la atención de los niños por una hora. Sólo un padre puede entender lo difícil que es este descansito de tener a los críos divertidos fuera de la tele o con algún payaso de comida rápida que trata de sicotizarlos. Todo bien con Ampolleta Prendía.

Dentro de las ganancias de este año está la participación en el escenario central de un artista local que sí logra desarrollar en pleno su presentación. Recordemos que el año pasado la presentación de un cuerpo de danza local resultó un tanto incómoda porque necesitando de todo el espacio posible espacio para desplegar sus piezas, debieron sortear los equipos de amplificación que estaban en el escenario. Es complicado, muy complicado subir danza a un escenario multidisciplinario, ya que es perentorio tener completa visibilidad. Este año figuró como representante de la zona Chinoy, que siendo local de San Antonio, el total del público no lo conocía, no obstante el artista logró conquistarlo con algo simple: calidad. Una anécdota que no es menor fue que al momento de ser presentado la locutora anunció que cantaba “baladas”, Chinoy, en cuanto tomó el micrófono, rectificó que en verdad “cantaba voladas”. Presentación de cinco estrellas, a excepción del alto volumen del sonido.

Luego le seguiría la presentación de los ska Sonora de Llegar, que pese a sonar demasiado fuerte, lograron ser pedidos para un bis de dos temas por su inconfundible público sharp, aunque colmando el umbral de tolerancia de los papás y abuelos que esperaban la aparición de la Sonora Palacios. En lo sucesivo la Sonora Palacios subió a escena a hacer su negocio conocido: la audiencia deliró al ritmo de los pasos que se bailan exclusivamente con mocasines y zapatos puntuditos.

El evento estuvo bueno en líneas generales, pero es una lástima que lo mejor se lo haya perdido la ministra Urrutia, porque después de pasearse por lo más débil, la “terraza patrimonial”, emigró antes que partiera la presentación en el escenario central.
EVENTO: CHILE +CULTURA 2007
Playa Chica, Cartagena
Octubre 21 del 2007
Por JVM
Imágenes: Jorge Villa M.

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